Se mantiene la temperatura interior durante más tiempo sin necesidad de climatizar artificialmente.
Aísla el interior de las condiciones climatológicas externas, evitando así, la condensación de vapor de agua que suele resultar en humedad.
Protege de la entrada de ruido exterior.
El aluminio y la poliamida mantienen sus propiedades con el paso de los años, no se desajustan, ni se oxidan.
El punto de fusión de estos materiales es muy alto (el aluminio funde a 660ºC y la poliamida a 260ºC), además son materiales incombustibles e inocuos.
Ambos materiales no son tóxicos y se pueden reciclar al 100% sin perder calidad ni cualidades.